Fotos: M.Palma V./Nov.09
¿Se han dado cuenta de la extraordinaria existencia de este ejemplar de Cryptocarya alba, peumo chileno que ha sobrevivido a la contaminación, al escaso espacio donde vive, a la falta de protección y cuidado por el uso y abuso de este espacio público residual?. Es sin duda notable, que en plena calle San Diego (una de las más contaminadas de la RMS) con calle Alonso Ovalle, encontremos este ejemplar que florece y da frutos todos los años, como si estuviese en su hábitat natural, perteneciente a las asociaciones nativas presentes en el bosque esclerofilo de la zona central de Chile. ¿No creen que un buen signo y símbolo del año del Bicentenario, sería establecer formas de protección y de la puesta en valor de este árbol, como de tantos otros sobrevivientes?. Con ello, estaríamos diciendoles a nuestros hijos y nietos, que los seres tan nobles como abandonados u olvidados, como este peumo, merecen una compensación, un reconocimiento...por qué no empezar al menos a ponerle su nombre, a resguardarlo y a rendirle los honores de verdaderos héroes?. ¿Qué dirá la Municipalidad de Santiago, CONAMA, el MINVU y CONAF entre otras instituciones por ejemplo frente a esta propuesta?.
Por: Mónica Palma Vergara / Corporación Patrimonio y Paisaje.
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